Por ser tú, por eso escribo,
al que si me acerco,
llena un océano de ilusión.
y si, mejor, me alejo,
lleva mi entusiasmo al corazón.
al que si me acerco,
llena un océano de ilusión.
y si, mejor, me alejo,
lleva mi entusiasmo al corazón.
Desde allí, al estar protegido,
resulta difícil disponer
de tal caudal contagioso,
de tanta energía que tal vez
un día será esparcida
y te devuelva por fin
un poco de ti, de nosotros,
con los ojos hacia el Sol,
que por ser tan luminoso,
encerrado has querido disponer
a tu antojo,
en los Girasoles hoy.
Encargo para entender